Con una silla de ruedas Ian Mackay ha recorrido 482,803 kilómetros en la naturaleza adentrándose en rutas donde su inmovilidad en las piernas no le impide hacer parte de senderismo de aventura. A pesar de su tenacidad, Mackay inició la travesía para levantar una bandera en pro de la adecuación de espacios para personas con discapacidad.
Mackey siempre fue amante de la naturaleza, incluso después del accidente que a sus 26 años le dejó en estado cuadripléjico al golpearse contra un árbol sufriendo una seria lesión en la columna vertebral que le inmovilizó desde el cuello hacia las extremidades inferiores.
Luego del accidente Mackey tardó dos años en volver a la naturaleza, pero su fuerza indetenible le llevó a atravesar desde Victoria, Columbia Británica hasta Portland, experiencia que junto a otras personas con su cuadro clínica le llevó a hacer campaña para mejorar los senderos y adaptarlos para este tipo de transporte en silla de ruedas.
Vías adaptadas
Mackey expresó al portal Mashable que durante en repetidas ocasiones, se atascan en los caminos y autopistas lo que pone en situación de alto riesgo a quienes sufren de cuadraplejia o cualquier otra discapacidad y a la vez limita su libertad de desenvolvimiento.
El plan de este senderista es hacer un llamado a Washington Bikes, una organización dedicada a hacer accesibles los caminos en rutas naturales, que a pesar de trabajar en el estado no se ha dedicado a adaptar espacios para discapacitados, pero podría interesarse en el proyecto.
La tecnología forma parte importante de esta propuesta, según Mackay es la clave para que personas con discapacidades puedan disfrutar de forma segura estando en la naturaleza, pero deben aliarse estas y las políticas de gobierno para crear espacios que sean de provecho para estas personas.
