Un millón de niños de nueve años están siendo parte de una prueba para probar la primera vacuna contra el virus tropical del dengue en Filipinas, el virus más común transmitido por mosquitos del género Aedes, también transmisores de enfermedades como el Zika o el Chikungunya.
Un 30% de la población infantil en las zonas afectadas por el dengue en Filipinas recibió la Dengvaxia, vacuna contra el dengue, como parte de una primera fase del tratamiento que finalizará al cierre del mes de Julio y cuya última fase tendrá una duración de un año, donde se piensa vacunar al total de la población infantil.
El dengue aqueja a 110 países a nivel mundial, es propio de las regiones del trópico, donde las condiciones climáticas y meteorológicas son un caldo de cultivo para la propagación de los mosquitos transmisores. Filipinas, Singapur, Indonesia Vietnam y Tailandia son la región más afectada por el dengue en el continente asiático.
Esta vacuna ha sido probada en cinco países asiáticos y cinco países latinoamericanos, pero según la Organización Mundial de la Salud su estatus aún espera aprobación al igual que otras cinco vacunas que se encuentran en período de estudio.
Efectos secundarios a largo plazo
Pero existen varios argumentos contra la Dengvaxia, sobre todo luego de la aplicación a un millón de niños en Filipinas, algunos expertos afirman que se trata de un grave error que no tendrá efectos secundarios graves a corto plazo pero sí en unos 15 años.
Por otra parte, ciertas partes de la comunidad científica consideran que un período de estudio de cuatro no es adecuado ni suficiente para comenzar a probar un tratamiento en niños humanos, de hecho países como Singapur y Tailandia han decidido esperar a que sea validada la Dengvaxia.
Más allá de la ciencia, otra controversia ha circulado en torno a esta vacuna y es que los niños que fueron parte de este estudio no tuvieron la posibilidad de oponerse a recibir la prueba, a pesar de los riesgos a largo plazo que ésta podría tener.
Sin embargo, el gobierno de Filipinas ha defendido su postura, explicando que posee un plan de riesgo y seguimiento para los niños que forman parte de la prueba de la Dengvaxia.
Fuente: Elpaís.com
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