La naturaleza a nuestro alrededor puede no sólo desestresarnos sino también aumenta nuestras esperanzas de vida, reduciendo el riesgo de padecer enfermedades cardíacas u otras como el cáncer, esto según ha sido revelado por un estudio de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard y el Hospital Brigham.
El estudio aplicado a 108.630 mujeres sobre la relación entre el contacto con la naturaleza y una buena salud ha sido publicado en la revista Environmental Health Perspectives, donde los niveles de vegetación fueron medidas a través de imágenes de satélite durante el período de 2000-2008.
Los beneficios de la vegetación a nuestro organismo, ya se han venido estudiando con antelación, descubriendo datos reveladores sobre los aportes curativos y medicinales que ofrece cada planta a nuestro organismo para sanar dolencias y según algunos serias enfermedades.
Asimismo, la investigación comprobó que las personas que viven en grandes ciudades pero que disponen de parques y áreas verdes para concurrir son menos propensas a desarrollar enfermedades cardíacas y mentales que quienes no poseen estos espacios, simplemente la presencia de estos ambientes nos resulta positiva.
Los investigadores de Harvard y Brigham descubrieron que las mujeres que habitaban en zonas verdes tenían una tasa de 34% menos mortalidad por enfermedades respiratorias, además de un 13% menos de probabilidades de morir por cáncer que quienes no disponían de vegetación en sus alrededores.
Peter James, líder del estudio explicó que las asociaciones entre el aumento de la exposición a la naturaleza y las tasas de mortalidad más bajas fue un hallazgo sorprendente, así como la relación entre una buena salud mental y los altos niveles de vegetación en un entorno.
Otros estudios sobre la cercanía con la naturaleza han comprobado la relajación que ofrece la presencia de una planta, y de igual forma influye en las mejoras del estado de ánimo, disminución de la depresión, y aumenta la humedad del aire hidratando las mucosas.
Fuente: Muyinteresante.es
