Japón y Corea del Sur exhortan a Corea del Norte a cancelar el lanzamiento del satélite que ha sido considerado como un test de misil balístico de largo alcance. Shinzo Abe, primer ministro japonés anunció el pasado martes las advertencias al gobierno de Kim Jong-un.
La reacción del primer ministro japonés se debe a la notificación por parte de las autoridades norcoreanas a la Unión Internacional de Telecomunicaciones y a la Organización Marítima Internacional sobre el envío del satélite de observación área entre el 8 y el 25 de febrero.
Shinzo Abe, expresó que el lanzamiento de este satélite es una violación a lo establecido por las resoluciones de las Naciones Unidas y que el país prepara sus defensas ante cualquier posible acontecimiento. Estados Unidos y Corea del Sur también han manifestado su desacuerdo sobre la acción de Corea del Norte, por eso el ministro de relaciones exteriores de Japón, Fumio Kishida anunció la unión a estos países para evitar dicho lanzamiento.
Asimismo, Corea del Sur advirtió que Corea del Norte pagará un alto precio si se logra enviar el satélite a órbita. La preocupación de estos países sobre un posible ensayo de misil balístico de largo alcance se incrementa luego de que durante los últimos días imágenes satelitales revelan las actividades en las instalaciones al noreste de la Corea del Norte.
El Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas ya evalúa imponer sanciones a Corea del Norte por su prueba atómica el pasado 6 de enero, En 2012, Pyongyang posicionó en órbita un satélite con un cohete de alto alcance, que constituyó una parte del programa de desarrollo de misiles balísticos intercontinentales.
El régimen de Corea del Norte ha hecho caso omiso a las sanciones de las Naciones Unidas, bajo la consigna de su libre derecho a desarrollar el espacio aéreo para fines pacíficos. Durante el pasado mes de enero, Corea del Norte reconoció haber realizado una cuarta prueba con una bomba de hidrógeno.
Fuente: Elmundo.es