A pesar de las decenas de civiles fallecidos en el territorio en guerra de Siria durante las últimas semanas, un “milagro” ocurrió cuando gemelos siameses nacieron en plena zona de conflicto a finales de julio, requiriendo una intención quirúrgica rompieron las barreras de la ciudad llegando hasta Damasco para ser atendidos.
En una ambulancia, Nawras y Moaz atravesaron las zonas cercadas por rebeldes y ejército sirio. De una forma casi improbable los gemelos fueron trasladados hasta un hospital para niños en las afueras de Damasco, donde serán intervenidos quirúrgicamente en un complicado procedimiento.
Las operaciones de la Media Luna Roja Árabe y la Organización Mundial de la Salud atendieron el pedido del grupo de médicos sirios responsable del caso, quienes expresaron la gravedad del estado de los siameses y la necesidad de un mejor tratamiento fuera de la zona de conflicto.
Conflicto sanitario
Sin embargo, todo el acontecimiento es un hecho que no suele ocurrir en Siria, la localización de estos recién nacidos es principalmente habitada por rebeldes pero las salidas están cercadas por el ejército y las vías alternas se han convertido en un negocio donde ciertas personas cobran altas cantidades de dinero para ofrecer el paso hacia el exterior de la zona.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas la guerra civil en Siria ha dejado 500.000 muertos y más de un millón cercadas, además un gran número de muertes se produce por emergencias que no pueden ser atendidas en centros médicos a causa de los obstáculos en la ciudad.
El caso de Nawras y Moaz advirtió nuevamente a la comunidad internacional de la terrible situación de guerra en Alepo y su impacto en el sistema sanitario, además de los bloqueos, cientos de médicos han fallecido por explosiones en los hospitales de la zona, mientras que un amplio número de galenos ha huído del país.
