Más de 1800 inmigrantes fueron rescatados por los guardacostas italianos en el mar mediterráneo durante el pasado lunes, pero la cifra es aún más abrumadora, de acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) 120 personas han muerto la última persona intentando cruzar esta travesía.
Otras 8.000 personas han sido auxiliadas durante los naufragios en las costas libias los últimos cinco días, demostrando así la incontenible movilización de personas buscando llegar al territorio europeo para posiblemente solicitar un asilo.
A pesar de la incertidumbre en cuanto al acogimiento de refugiados en el territorio europeo y de la reciente salida de Reino Unido de la UE, miles de personas continúan lanzándose al mediterráneo donde 4.000 inmigrantes y refugiados han muerto durante los primeros siete meses de este año.
Respecto al pasado 2015, el número de fallecidos ha aumentado en un 35% según lo anunciado por la OIM, de los que tres cuartas partes han muerto en estas aguas, sobre todo en la zona correspondiente al mar de libia en el mediterráneo.
En este mar fueron hallados grandes números de cadáveres en reiteradas oportunidades, este es considerado un mar abierto y por sus profundos fondos marinos y corrientes se ha convertido en el más frío del Mediterráneo oriental.
