El abrazo de la serpiente es la primera película colombiana nominada a los premios de la Academia en su edición 88. La producción compite en la categoría de mejor película de habla no inglesa y un grupo de venezolanos forma parte de este prometedor rodaje presentado inicialmente en el festival del cine de Cannes de 2015.
La película de Ciro Guerra reseña la historia de Karamakate, un chamán en la Amazonía colombiana, último sobreviviente de su tribu y del viaje junto a dos científicos Theodor Koch-Grünberg y Richard Evans Schulte quienes buscan una planta sagrada para beneficios curativos.
La combinación arriesgada de una cinta en lengua indígena, grabada en blanco y negro, cautivó a la academia. Aunque no es el primer reconocimiento que obtiene la película, ya fue galardonada como mejor película en el Festival de Cine en India y en el Festival de Cine de Lima y el Art Cinema Award en el festival de Cannes.
Para el director Ciro Guerra, la cinta es un llamado a la reflexión sobre la pérdida de identidad de las comunidades originarias, pero también sobre el beneficio de cruzar saberes ancestrales y los conocimientos científicos occidentales
El abrazo de la serpiente compite con cuatro cintas: A War de Dinamarca, Mustang de Francia, Theb de Jordanía y Son of Saul de Hungría.
El premio Oscar, es la estatuilla dorada más deseada por el séptimo arte, otorgado por la Academia de las Artes y Ciencias cinematográficas y elegido por 5.783 personas, entre las que se incluyen actores, abogados, productores, técnicos, escritores y directores.
Su actual presidente es Hawk Coch y su vicepresidente Tom Hanks.
Venezolanos en la producción.
Aunque propiamente “Abrazo de la Serpiente” es una cinta colombiana, es coproducida por argentinos y venezolanos. Desde la perspectiva artística y también técnica una representación venezolana forma parte de este proyecto nominado los premios de la Academia: Luigi Sciamanna (Reverón 2011) actor venezolano quien interpreta el papel de Fray Gaspar; Nascuy Linares en la composición de la música principal de la película, Gustavo Gonzáles como supervisor técnico, Angélica Varilla como Script; Victor Jaramillo como editor de sonido.
